Acerca de este lugar

Los orígenes del Templo de Tiobamba se remontan a la época del Imperio Incaico, cuando la zona era conocida como "Tiobamba Pampa" y servía como importante centro agrícola y administrativo. Tras la conquista española, la construcción de la iglesia actual se inició en 1590 bajo la dirección del sacerdote Diego de Salas. El templo fue finalizado en 1603 y dedicado a San Pedro Apóstol.El Templo de Tiobamba presenta una planta en forma de cruz latina, característica del estilo barroco. Su fachada principal, orientada hacia el oeste, destaca por su sobria elegancia y armonía de proporciones. Un arco de medio punto enmarca la entrada principal, flanqueada por dos torres gemelas de dos niveles. Un balcón tallado en madera, sostenido por dos columnas dóricas, corona la fachada, añadiendo un toque de majestuosidad al conjunto. Al ingresar al templo, el visitante se encuentra con un amplio espacio interior bañado por la luz natural que se filtra a través de los ventanales. El retablo mayor, tallado en madera de cedro y dorado con pan de oro, es una obra de arte que narra escenas bíblicas y la vida de San Pedro Apóstol. A lo largo de las paredes laterales, se despliegan pinturas murales que representan la historia religiosa de la región, incluyendo la llegada de los españoles y la evangelización de la población nativa. El Templo de Tiobamba no solo representa un importante monumento arquitectónico, sino que también constituye un símbolo de la profunda religiosidad y el arraigo cultural del pueblo de Maras. A lo largo de los siglos, el templo ha sido escenario de numerosas celebraciones religiosas y festividades populares, convirtiéndose en un punto de encuentro y cohesión social para la comunidad.