Acerca de este lugar

El Cerro Miramar está ubicado en el distrito de Mache, en la provincia de Otuzco. Este cerro es conocido por sus impresionantes vistas y su importancia tanto ecológica como turística. El Cerro Miramar se encuentra dentro de la región natural “quechua”, caracterizada por su geografía montañosa. Pertenece a los Andes Occidentales del norte del Perú, ofreciendo un paisaje típico de la sierra liberteña. Su altitud aproximadamente es de 3,552 metros sobre el nivel del mar. El área abarca varias hectáreas de terreno montañoso y esta tambien comprendido por la peña blanca y pushigui. El clima en el Cerro Miramar es típicamente frío y seco durante gran parte del año, con temperaturas bajas debido a la altitud. Durante los meses de invierno, las temperaturas pueden descender considerablemente, mientras que en verano los días son frescos y las noches frías. Las lluvias son más frecuentes entre diciembre y marzo. Desde la cima, se pueden observar paisajes impresionantes que incluyen valles, quebradas y otras elevaciones de la región. En la zona se pueden encontrar pequeñas lagunas altoandinas. Se cree que hay vestigios de culturas precolombinas en la región, lo que añade un interés cultural al lugar. El inicio se encuentra a 5 minutos caminando desde la plaza de mache y el segundo acceso es aproximadamente 10 minutos desde el caserío quiningo. Las rutas no son completamente pavimentadas, por lo que se recomienda realizar las travesías con guías locales. Es posible realizar caminatas de varios días para explorar la zona. Se pueden encontrar: Ichu (Stipa ichu), una especie de pasto altoandino que domina gran parte del paisaje. Queñoales (Polylepis spp.), árboles resistentes al frío y a la altitud y Totoras en las áreas cercanas a las lagunas. En cuanto a la fauna, el Cerro Miramar es hogar de especies adaptadas a las altitudes andinas, como: Zorros andinos (Lycalopex culpaeus) y Vizcachas (Lagidium peruanum), roedores que habitan en las áreas rocosas y algunas de las aves más representativas son: Águilas y nidos de águilas, Colibrí gigante y perdices. El Cerro Miramar es un destino ideal para los amantes de la naturaleza y la aventura. Entre las actividades más comunes están: Senderismo y trekking: Las rutas de montaña ofrecen distintos niveles de dificultad, desde caminatas sencillas hasta excursiones más desafiantes. Avistamiento de aves: Debido a la diversidad de especies, es un lugar propicio para la observación de aves. Campismo: Los alrededores del cerro permiten disfrutar de noches estrelladas en un entorno natural y tranquilo. Fotografía de paisajes: Los contrastes entre los valles, las lagunas y las montañas hacen que el lugar sea ideal para fotógrafos aficionados y profesionales. Este cerro es un recurso natural de gran valor, no solo por sus características ecológicas y paisajísticas, sino también por las oportunidades turísticas que ofrece, contribuyendo al desarrollo sostenible de la región.